Estar a cargo de otra persona, de su educación, de su bienestar y su crianza es una de las misiones más importantes de la vida, porque formar a otro ser humano para que sea responsable de sí mismo, productivo, funcional e independiente son cualidades necesarias en prácticamente todas las personas. “A los hijos se les educa para la independencia” (eso nos decía una maestra en la Universidad), para que puedan construir sus propios recursos económicos sin depender de alguien más, así que ser padre o un ejemplo para ellos también implica necesariamente enseñarles educación financiera, porque los buenos conocimientos financieros les ayudarán a que construyan y fabriquen sus propios recursos para lograr un mejor futuro económico.

¿Qué es la independencia financiera?
En términos simples, la independencia o libertad financiera significa poder vivir del dinero o recursos generados por las inversiones que vamos haciendo a lo largo del tiempo, es decir, la meta de la independencia o libertad financiera es que seamos capaces de lograr mantener nuestro estilo de vida o el que deseamos tener sin la necesidad de trabajar, y te preguntarás ¿cómo diablos logro eso? bueno, pues una manera es elaborar un plan para obtener ingresos por las inversiones que vayamos haciendo, por ejemplo, inversiones en instituciones financieras, renta de propiedades, cobro de regalías, etcétera. Lo que busca la libertad financiera es generar ingresos que nos permitan dejar de depender (lo más pronto posible) de la generación constante de un sueldo para poder vivir.
¿Cómo se logra la independencia financiera? Justo ahí es donde entra la importancia de la educación financiera, la cual nos enseña a establecer prioridades de gasto, cuidado del dinero, generación de ahorro y la inversión de esos ahorros para que el dinero crezca, se reinvierta, genere más y vuelva a reinvertirse.
Pero para enseñar esto a los más pequeños, es primordial que en primer lugar los adultos entendamos que en la educación de nuestros hijos debe estar presente sí o sí las enseñanzas económicas. Es primordial que los adultos desarrollemos las siguientes cualidades:
- Disciplina con el dinero.
- Paciencia.
- Aprender a ahorrar.
- Desarrollar buenos hábitos financieros (no hacer derroches, no hacer gastos innecesarios).
Entonces, una primera lección básica para tomar el control de nuestra relación con el dinero es aprender a gestionarlo (la manera en la cual lo tratamos), ahorrarlo para después invertirlo, y estos son tres aspectos que la gran mayoría de las personas en México no tienen bien entendido y desarrollado.
¿Qué es la Educación Financiera?
Básicamente son los conocimientos, técnicas y habilidades que permiten planear nuestros ingresos, administrarlos eficientemente, crear-incrementar patrimonio y (muy importante) protegerlo (con ayuda de los seguros).
Para que los niños aprendan a planear, administrar e incrementar su dinero es necesario acercarlos a conocimientos financieros que ellos puedan poner en práctica, pero para hacerlo es importante que primero seamos los adultos quienes los entendamos y apliquemos para poder transmitirlos después.
Es importante que al enseñar educación financiera a los niños no lo hagamos como si fueran “adultitos”, hay que enseñarles a su nivel, utilizando intereses y ejemplos cercanos a su edad para que así aprendan el valor del dinero, siempre poniendo énfasis en que con esfuerzo y paciencia obtendrán bienes materiales, por ejemplo, juguetes, video juegos y diferentes recompensas que sean fáciles de entender para ellos.

Esta es una fórmula Básica para lograr la Independencia Financiera
- No gastes todo lo que ganas. Una de las principales razones por las cuales la mayoría de las personas no mejoran su situación económica se debe a que jamás ahorran, por ello no cuentan con recursos para invertir o para aprovechar alguna oportunidad que se les presente como la compra de bienes, una oferta o descuento en alguna mercancía. Otra cosa que hace la mayoría de las personas en México cuando ganan más dinero es gastar más, o sea que elevan su nivel de gasto en cuanto pueden, mientras que lo más recomendado es continuar viviendo como lo hacen para ahorrar el dinero extra, ello les permitirá buscar opciones para hacer crecer ese ahorro.
- Reinvierte las ganancias de tus inversiones. Cuando hayas logrado invertir tu ahorro, no te gastes los intereses o ganancias que hayas obtenido, esas junto con el capital inicial debes invertirlas nuevamente, luego con lo ganado vuelve a invertirlo y así sigue constantemente. Cuando tienes una cantidad original de dinero y ganas intereses con ella, luego reinviertes todo para ganar más y continúas haciendo lo mismo a eso se le llama interés compuesto, es decir, vas reinvirtiendo cantidad original más intereses sobre intereses y así multiplicas tu dinero con el tiempo, de esta manera haces que tus recursos trabajen para ti y dejas de ser tú el que esté trabaje y trabaje ganando dinero para gastarlo constantemente sin que este se multiplique y trabaje a tu favor.
- No dejes el hábito. Continúa reinvirtiendo hasta que logres que se convierta en un estilo de vida, no gastes tus ganancias hasta que logres que tu capital original más tus inversiones te den los rendimientos que paguen tus gastos mensuales ajustados a la inflación. En ese punto puedes buscar asesoría de expertos para invertir en bonos, fondos de inversión u otros instrumentos financieros que te ayuden a crecer tu capital.
- Diversifica, diversifica, diversifica. Mi abuela siempre decía “nunca pongas todos los huevos de oro en la misma canasta”, esto significa que jamás tengas todo tu dinero en la misma inversión o en el mismo lugar; entonces lo que debes hacer es, una vez que hayas conseguido un capital importante gracias al interés compuesto, divídelo y con cada una de las partes haz nuevas inversiones, así diluyes los riesgos porque nunca debes olvidar que todos los sectores económicos presentan bajadas y crisis, pero si tu dinero está diversificado es más probable que salgas adelante más rápido de una crisis económica.
No olvides que el mejor momento para enseñar todas estas ideas a los más pequeños no es el día de mañana cuando “estén más grandes”, no esperes a ese momento, lo mejor es hacerlo desde ya con palabras y ejemplos adecuados a su nivel, utilizando ejemplos sencillos y prácticos en los cuales puedan aplicar estas lecciones básicas de finanzas personales y educación financiera.